Limpiar zapatos con bicarbonato

Limpiar zapatos con bicarbonato

Limpiar zapatos con bicarbonato

Cómo limpiar los zapatos blancos sin lejía

Una vez tuviste unos preciosos zapatos blancos. Pero después de usarlos unas cuantas veces, pasaron rápidamente de ser un blanco deslumbrante a un gris desvaído. Las zapatillas de lona de algodón se vuelven así: tienden a absorber la suciedad y las manchas. Y ahora no te pondrás esos zapatos blancos en ningún sitio que no sea el patio.
Con todos estos métodos, asegúrate de empezar eliminando los trozos grandes de suciedad con un cepillo suave, de limpiar la suela y de quitar los cordones. De esta manera, no importa cómo vuelvas a dejar los zapatos blancos, los limpiadores podrán trabajar en las cosas más difíciles.

Cómo limpiar los zapatos con pasta de dientes

Uno de los mayores misterios del hogar es cómo limpiar los zapatos blancos. Por muy útiles y prácticos que sean, los zapatos blancos son notoriamente difíciles de mantener frescos e inmaculados después de sacarlos de la caja. Por eso hemos buscado por todas partes los mejores consejos para limpiar los zapatos blancos, para que puedas dominar esta tarea de una vez por todas. Desde la lejía hasta el bicarbonato de sodio, pasando por la pasta de dientes, aquí tienes algunas de las mejores maneras de mantener tus zapatos blancos en plena forma.
Recuerda que, aunque es posible averiguar cómo limpiar los zapatos blancos, se necesita un poco más de tiempo y compromiso, además de unos cuantos atajos de limpieza brillantes. Si estás dispuesto a aceptar el reto, los resultados merecen la pena. Un poco de esfuerzo puede llegar muy lejos.
Lo primero es lo primero: La prevención es la clave. Antes de ponerte tus zapatos nuevos por primera vez, los expertos recomiendan que los trates inmediatamente con un repelente de manchas y agua en spray. Repite el proceso de pulverización cada pocas semanas para mantener tus zapatos protegidos sin importar dónde pienses usarlos o con qué tipo de clima, derrames o suciedad entres en contacto durante el día.

Limpiar los zapatos con bicarbonato de sodio y peróxido de hidrógeno

¿Recuerdas cuando nos comprometimos a mantener nuestros flamantes Keds con el tono más níveo de blanco brillante? Por desgracia, nuestros intentos fueron en vano, y después de golpear el pavimento miles de veces, nos quedamos con un gris salpicado de barro. No te preocupes, querido amigo, porque tenemos una solución que devolverá a tus queridas patadas su antigua gloria de alabastro.
¿No tienes tiempo para sacar la grasa de los codos? Concéntrate en las suelas de goma desgastadas y coge un Borrador Mágico para una solución rápida cuando estés en un apuro. (Y dale las gracias a nuestro novio, el Sr. Limpieza, mientras lo haces).

Cómo limpiar los zapatos de cuero con bicarbonato de sodio

Los olores de los zapatos pueden ser una molestia, tanto para ti como para los que te rodean. Hay muchos productos comerciales que se promocionan para enmascarar o eliminar el olor de los zapatos, pero uno de los mejores -y sin duda uno de los menos caros- es un producto que probablemente ya tenga en su casa: el bicarbonato de sodio. Es posible que haya escuchado el consejo de colocar una caja abierta de bicarbonato de sodio en el refrigerador para absorber los olores desagradables de los alimentos. Utilizando el mismo principio, el bicarbonato de sodio puede hacer lo mismo con sus zapatos.
Químicamente, el bicarbonato de sodio es técnicamente bicarbonato de sodio, una sustancia en polvo con un pH ligeramente básico (alcalino). El bicarbonato de sodio tiene el efecto de neutralizar el pH ácido de muchas sustancias en su proximidad, incluido el aire húmedo de los zapatos donde prosperan las bacterias. Al igual que muchas sustancias que causan olores, el sudor humano es ligeramente ácido por naturaleza, y la aparente magia del bicarbonato de sodio puede deberse al hecho de que neutraliza los ácidos que fomentan las bacterias.
Con este método, el bicarbonato de sodio entra en contacto con cada parte del zapato, y las bacterias que causan el olor no tienen dónde esconderse. Este método funciona bien con los zapatos de tela, pero hay que tener cuidado con los zapatos de cuero y ante, ya que la acumulación de bicarbonato de sodio puede hacer que estos materiales se vuelvan frágiles. Con los zapatos de ante y cuero, es mejor utilizar bolsitas de bicarbonato de sodio.

Acerca del autor

admin

Ver todos los artículos