Que es una buena higiene bucal
Definición de higiene bucal
La higiene bucal es la práctica de mantener la boca limpia y libre de enfermedades y otros problemas (por ejemplo, el mal aliento) mediante el cepillado regular de los dientes (higiene dental) y la limpieza entre los dientes. Es importante que la higiene bucal se lleve a cabo con regularidad para poder prevenir las enfermedades dentales y el mal aliento. Los tipos más comunes de enfermedades dentales son la caries dental y las enfermedades de las encías, como la gingivitis y la periodontitis[1].
Las directrices generales para los adultos sugieren cepillarse los dientes al menos dos veces al día con un dentífrico fluorado: cepillarse a última hora de la noche y al menos en otra ocasión[2] La limpieza entre los dientes se denomina limpieza interdental y es tan importante como el cepillado de los dientes[3], ya que un cepillo de dientes no puede llegar entre los dientes y, por tanto, sólo elimina alrededor del 50% de la placa de la superficie de los dientes[4] Existen muchas herramientas para limpiar entre los dientes, como el hilo dental, la cinta adhesiva y los cepillos interdentales; cada persona debe elegir qué herramienta prefiere utilizar.
Rutina de higiene bucal
¿Sabías que febrero es el Mes Nacional de la Salud Dental Infantil? Establecer unos hábitos de higiene bucal fuertes, constantes y excelentes a una edad temprana te da una ventaja para tener unos dientes y encías sanos toda la vida. Una buena higiene bucal también es vital para su salud general. Aquí tienes todo lo que necesitas saber para tener una boca y un cuerpo sanos.
Probablemente ya sepas que las bacterias de tu boca pueden provocar caries y enfermedades de las encías. Pero los estudios están descubriendo que el daño no se detiene ahí. Cuando las encías se infectan, permiten que las bacterias se abran paso hasta el torrente sanguíneo, lo que explica por qué varios problemas de salud graves están relacionados con la enfermedad de las encías. Algunas de las afecciones relacionadas con las enfermedades de las encías son la diabetes, los accidentes cerebrovasculares, las enfermedades cardíacas y el cáncer.
La ciencia es cada vez más clara en cuanto a la importancia de la higiene bucal. Cuidar tu boca no sólo te ayudará a mantener tus dientes para toda la vida, sino que también beneficiará a tu salud en general al asegurar que tu cuerpo está cuidado.
Formas de mantener la higiene bucal
La práctica de una buena rutina de higiene bucal, combinada con visitas regulares al dentista, puede ayudar a proteger los dientes y la boca. La mayoría de las afecciones bucodentales pueden prevenirse en gran medida y tratarse en sus primeras fases. Mantener una buena salud bucodental tiene un impacto positivo en su salud general, su bienestar y su calidad de vida.
Una de las mejores formas de proteger su boca es acudir al dentista para someterse a revisiones y limpiezas dentales periódicas. El dentista puede ayudarle a mantener sus dientes y su boca sanos. Una revisión periódica permite a su dentista ver si tiene algún problema dental, proporcionar un plan de tratamiento si es necesario y eliminar cualquier acumulación de placa, que si no se controla puede provocar caries dental o enfermedad de las encías (periodontitis). Al trabajar con su dentista, también puede aprender a prevenir las enfermedades bucodentales y posiblemente evitar la necesidad de tratamiento.
Tipos de higiene bucal
causa de la pérdida de dientes entre los adultos mayores de 45 años.4,6,7 Los resultados de una serie de estudios también aportan pruebas de que la enfermedad periodontal está vinculada a afecciones crónicas de salud como los accidentes cerebrovasculares, las enfermedades cardiovasculares, la diabetes, las enfermedades respiratorias y los bebés prematuros de bajo peso.4-6 La eliminación mecánica de la acumulación de placa mediante el cepillado al menos dos veces al día, el uso del hilo dental a diario y la atención dental rutinaria es fundamental para reducir o prevenir la enfermedad periodontal. La tabla5,9,10 enumera los signos de la enfermedad periodontal.
Los factores que pueden aumentar el riesgo de desarrollar la enfermedad periodontal son los cambios hormonales, como los que se producen durante la pubertad o el embarazo, las afecciones médicas, como la diabetes, y el uso de agentes farmacológicos, como los bloqueadores de los canales de calcio, la ciclosporina y la fenitoína. 4,6 Además, las personas que toman anticolinérgicos y antidepresivos son más susceptibles de padecer enfermedad periodontal debido a la disminución del flujo de saliva.4 Por último